El Líbano goza de una posición geográfica estratégica en el Mediterráneo oriental, donde confluye con Europa, Asia y África. Limita al norte y al este con Siria, al oeste con el mar Mediterráneo y al sur con Israel. Alejandra Sansivirini, alumna del Máster Profesional de Analista Internacional y Geopolítico de LISA Institute, propone un análisis DAFO del Líbano para explorar las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas que caracterizan al país en el escenario geopolítico actual.
Fortalezas del Líbano
Ubicación estratégica:
- El territorio cuenta con 250 km de longitud y entre unos 50-80 km de ancho, con una estrecha llanura que se extiende en la costa y donde se encuentran las principales ciudades del país, como Beirut o Trípoli. Históricamente, esto le ha conferido un papel importante como centro comercial y cultural. Desde la antigüedad, el Líbano ha sido punto de encuentro de diversas civilizaciones y ha estado bajo dominio de diversos imperios (fenicios, romanos, árabes entre otros), además de su ubicación en la intersección de rutas comerciales terrestres y marítimas que lo ha convertido en centro de intercambio de bienes, culturas, servicios e ideas durante siglos. Ciudades como Tiro, Sidón y Biblos se convirtieron en importantes puertos comerciales de productos textiles y comercio de especias, haciendo de conexión entre el Mediterráneo y Oriente Próximo. Incluso, durante la Edad Media fue centro financiero como resultado de su papel en el comercio entre Europa y Asia, siendo los bancos libaneses los que financiaban el comercio internacional.
Capital humano:
- El Líbano cuenta con población joven y educada, además de una alta tasa de alfabetización y fuerza laboral cualificada. La tasa de alfabetización es alta, pero también existe una experiencia técnica generalizada en el mercado local. En cuanto al alto nivel educativo, el Líbano se sitúa entre las tasas de alfabetización más altas del mundo árabe, con aproximadamente el 90% de su población adulta gracias al fuerte sistema educativo tanto público como privado.
- También ha sido durante mucho tiempo un importante centro de educación para los países árabes, contando con relevantes universidades como la Universidad Americana de Beirut y la Universidad Saint Joseph, reconocidas por su excelencia académica. El país ofrece universidades tanto públicas como privadas con un amplio espectro de programas académicos y alto prestigio regional e internacional. La mayoría de los libaneses son políglotas, dominando el árabe como lengua oficial, pero también el francés y el inglés, dándoles una ventaja significativa en el mercado laboral.
- En cuanto a la fuerza laboral cualificada, el Líbano tiene una fuerza laboral bien educada y cualificada en influyentes campos como la ingeniería, medicina, tecnología o finanzas. Tiene además una larga tradición de emprendimiento y un sector privado dinámico, por lo que ha resultado en una clase empresarial ciertamente experimentada y capacitada. Incluso, los trabajadores libaneses han sido reconocidos por su adaptabilidad y su rápida capacidad de aprendizaje para nuevas habilidades. En conclusión, todos estos factores demuestran el capital humano altamente cualificado, población joven y educada, una alta tasa de alfabetización y una fuerza laboral cualificada, representando así una importante ventaja para el país permitiéndole competir en la economía global y desarrollar una economía basada en el conocimiento.
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Riqueza cultural:
- El país posee una rica herencia cultural como resultado de la confluencia de diferentes civilizaciones a lo largo de su historia y la herencia que ha dejado cada una (tradiciones, lenguas, estilos de vida, etc.). Esto se refleja en su patrimonio arquitectónico, gastronómico y artístico, reconocido por la UNESCO. El país alberga gran variedad de sitios arqueológicos, monumentos históricos y lugares religiosos como las ruinas romanas de Baalbek, la ciudad fenicia de Biblos y la mezquita omeya de Al-Amin en Beirut, reconocidas por la UNESCO y protegidas a nivel nacional. Además, dentro de aspectos más económicos, las normas culturales y sociales brindan un fuerte apoyo a los emprendedores porque la cultura libanesa enfatiza la iniciativa, la creatividad y la innovación, fomentando así la toma de riesgos empresariales.
- Las relaciones personales son imprescindibles para hacer negocios en el país, ya que valores como la confianza y lealtad son valorados positivamente a la hora de conocer a potenciales socios y construir relaciones empresariales sólidas. La comunicación no verbal, como el contacto visual directo, el lenguaje corporal y los gestos, son importantes dentro de la cultura debido a que se utilizan a menudo para transmitir mensajes. Además, su sociedad es reconocida por su hospitalidad y tienden a recibir a sus invitados con generosidad ofreciendo alimentos, bebida o incluso alojamiento. El proceso de negociación por parte de los libaneses se caracteriza por ser directo y asertivo, a pesar de que se espere «regatear» y negociar. También se toman su tiempo en este proceso porque priorizan establecer buenas relaciones y generar confianza antes de llegar a un acuerdo. Finalmente, la cultura financiera libanesa expecta flexibilidad y adaptabilidad por parte del socio ante los cambios en las condiciones o expectativas. Esta cultura y clima financiero benefician al país para continuar prosperando económicamente.
Sector privado dinámico y ecosistema de startups crecientes:
- El sector privado y el ecosistema de startups en el Líbano son dinámicos a pesar de las crisis económicas que han tenido lugar y los conflictos que han afectado a la región. Las startups o empresas de diferentes sectores ya están establecidas, y cuentan con una red y experiencia considerables. El Líbano tiene un sector privado resiliente y adaptable a pesar de las dificultades económicas; las empresas locales han luchado contra las dificultades, encontrando formas innovadoras de trabajar y prosperar en medio de la incertidumbre del país. Además, el país alberga gran cantidad de pequeñas y medianas empresas que son ágiles y flexibles actuando como motor de la economía libanesa y que se adaptan a los rápidos cambios del mercado. Estas PYMES son cada vez más dirigidas por la juventud del país, la cual tiene un creciente interés por el emprendimiento y lanzar sus propios negocios con los beneficios que ello conlleva. Con respecto al ecosistema en auge de startups, en los últimos años ha tenido un crecimiento significativo en el que se han establecido incubadoras, aceleradoras y fondos de capital riesgo para apoyar a las startups en sus primeras etapas. Estas startups han desarrollado importantes iniciativas y soluciones innovadoras para problemáticas locales y regionales (sobre todo en el sector de la tecnología de la información, comunicación, educación, salud y energía).
- A pesar del escaso apoyo del gobierno libanés, se han conseguido tomar algunas medidas para apoyar a las startups, como el Fondo Nacional de Emprendimiento, que pretende implementar reformas regulatorias y mejorar a su vez el proceso de establecimiento de nuevas empresas y negocios. Algunos ejemplos de startups incluyen Anghami, Careem y Zomato.
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Debilidades del Líbano
Inestabilidad política:
- El Líbano ha sufrido una extensa historia de inestabilidad política, caracterizada por conflictos sectarios y la influencia de actores externos. Desde la guerra civil libanesa (1975 -1990), el asesinato de Rafik Hariri en 2005, la guerra del Líbano en 2006 con el conflicto entre Israel y Líbano, las protestas contra la corrupción y el mal gobierno entre 2019 y 2020, y la crisis política de 2021 donde el país no ha logrado conformar un nuevo gobierno ante la renuncia del anterior. Más actualmente, esta inestabilidad también se ha visto afectada por las guerras y conflictos regionales, como en los países y territorios vecinos como Siria, Israel o Palestina, además de la presencia de grupos terroristas que operan en la región (Hezbolá, entre otros).
- En consecuencia, la inestabilidad política ha afectado a gran variedad de elementos como la disuasión de la inversión extranjera/crecimiento económico, la influencia externa de otros países (Siria e Israel) en la política interna, la corrupción, el deterioro de infraestructuras (luz, agua…), aumento de la pobreza y desigualdad, y el empeoramiento de la situación humanitaria (personas desplazadas y asistencia humanitaria).
Debilidad institucional:
- Las instituciones libanesas son consideradas débiles y corruptas, lo cual dificulta, entre otros aspectos, la implementación de políticas públicas eficaces y la lucha contra la corrupción. La debilidad de las instituciones libanesas se ha visto exacerbada por varios motivos: la falta de transparencia del gobierno y su rendición de cuentas que facilita la corrupción y el abuso de poder de ciertos individuos y partidos; la ineficiencia burocrática caracterizada por ser lenta, dificultando así la realización de negocios o la eficaz prestación de servicios públicos; y por supuesto la politización de las instituciones que se ven afectadas por las diferentes facciones y dificulta la toma de decisiones imparcial y basada en evidencia. Finalmente, también es necesario tener en cuenta que existe una cierta falta de capacidad técnica en las instituciones libanesas (material, tecnología, personal, inteligencia), la cual es necesaria para llevar a cabo sus funciones de forma efectiva.
- Todo ello ha llevado a que el país no pueda implementar políticas públicas eficaces que ayuden a desarrollar el sector económico y social, que aumente la corrupción y descienda la confianza en el gobierno por parte de la población, que exista un deterioro en la seguridad nacional con incapacidad para hacer cumplir la ley y mantener un orden, y como se ha mencionado anteriormente, exista un empeoramiento de la situación humanitaria y cada vez más población necesite asistencia. En conclusión, el Líbano se enfrenta a un entorno empresarial debilitado con procedimientos legales deficientes, bajo nivel de independencia judicial y alta percepción de corrupción.
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Alta dependencia del sector de servicios:
- La economía libanesa se ha vuelto altamente dependiente del sector servicios, especialmente del turismo y las remesas de los expatriados, lo que la hace vulnerable a las crisis económicas externas. El sector de servicios representa alrededor del 94.1% del PIB del Líbano, según el Banco Mundial, lo que convierte al país en uno de los más dependientes de este sector en el mundo. Dentro del sector de servicios libanés, las actividades más importantes son el turismo (destino turístico popular con rica historia, cultura y paisajes), a pesar de ser golpeado duramente por la inestabilidad política y los conflictos regionales. También se encuentran las remesas de expatriados, es decir, los libaneses que viven en el extranjero envían remesas a sus familias en el Líbano, que representan una importante fuente de ingresos para la economía.
- Sin embargo, la dependencia de las remesas hace que el país sea vulnerable a las crisis económicas en aquellos países donde viven los expatriados. Y finalmente, el sector financiero que se encuentra bien desarrollado en el país gracias a la presencia de importantes bancos regionales, compañías de seguros con largas trayectorias y otras instituciones financieras relevantes que lo han fortalecido. Sin embargo, debido a las recientes crisis y conflictos, este sector se ha visto deteriorado y supone una importante debilidad y riesgo para el estado.
- El peso de la banca libanesa se ha reducido debido a la intensa crisis que atraviesa; el comercio internacional se ha reducido considerablemente por la disminución de reservas de dólares y el poder adquisitivo de los libaneses, y el turismo no se ha recuperado de la pandemia COVID-19 y su difícil situación regional no atrae a los turistas.
Infraestructura deficiente:
- La infraestructura del país ha sufrido deterioros significativos en estos últimos años y se encuentra parcialmente en mal estado, sobre todo con problemas de suministro de electricidad, agua y transporte. El sector energético es sin duda uno de los mayores desafíos para el país.
- La compañía nacional Electrícete du Liban es una empresa estatal fallida con más de US$ 40.000 millones de deuda que apenas suministra unas pocas horas de luz al día. Las ciudades sufren cortes de electricidad de forma crónica y prolongada que afectan a la vida cotidiana de la población y la prestación de servicios esenciales, causado principalmente por la falta de inversión en la red eléctrica, la mala gestión del sector y la dependencia de la importación de combustibles de otros estados (Egipto, Irak) para abastecer a la población en su completo. Además de la electricidad, el suministro de agua también supone un importante problema, sobre todo su acceso seguro, con ciertas áreas que sufren escasez y mala calidad. Esto se debe a una infraestructura envejecida de la red de canales, la falta de un tratamiento adecuado y también la sobreexplotación de recursos hídricos en el país sin cierto control. La infraestructura de transportes también ha sufrido daños en estos últimos años, concretamente el transporte marítimo por las explosiones de agosto del 2020 en Beirut, destruyendo gran parte del área portuaria.
- También existen carreteras congestionadas y con necesidad de restauración por su deterioro, un transporte público un tanto deficiente y una red ferroviaria aún por desarrollar en la que se están comenzando a plantear proyectos de inversión. Esto dificulta el movimiento de la población, al igual que de bienes y productos, y aumenta los precios/costos de transporte reduciendo la productividad. Esta deficiencia en las infraestructuras también afecta a otros sectores, como las telecomunicaciones, la sanidad y la gestión de residuos para la sostenibilidad.
Oportunidades del Líbano
Descubrimientos de petróleo y gas:
- En 2020 un consorcio conformado por las empresas TotalEnergies, Eni y Novatek decidieron explorar y perforar un pozo exploratorio en la franja 4 frente a la costa libanesa, donde se encontraron indicios de gas natural. Más tarde, en febrero de 2023, se volvieron a aceptar las licencias de exploración y producción de petróleo y gas en otros nueve bloques diferentes frente a la costa del país. Expertos estiman que estos recursos petroleros y gaseros podrían alcanzar a un valor de 850.000 millones de metros cúbicos de gas natural y 660 millones de barriles de petróleo.
- Estos acontecimientos podrían ofrecer nuevas oportunidadeseconómicas al estado, entre ellas, reducir la dependencia energética de otros estados de los cuales importa, aumentar los ingresos del gobierno libanés que ayudarían a su vez a financiar el desarrollo económico y social; también beneficiaría a la creación de empleo, la mejora del desempleo y el nivel de vida del país. Finalmente, ayudaría a la atracción de inversiones extranjeras, aunque para esta exploración ya se hayan interesado varias compañías.
Reconstrucción post conflictos:
- Los diferentes conflictos armados por los que ha pasado el Líbano, desde antes de su Guerra Civil, hasta la actualidad, con las tensiones regionales por el conflicto entre Palestina e Israel, el país ha sufrido serios daños a todos los niveles. La reconstrucción del país podría significar una oportunidad para mejorar el país en su conjunto, pero sobre todo una economía más moderna y sostenible. El gobierno libanés, por una parte, ha elaborado planes de reconstrucción nacional que incluyen la inversión en infraestructura, la creación de empleo y la promoción del desarrollo económico, aunque los resultados no se han podido comprobar aún. De igual manera, la comunidad internacional, bajo el poder de actuación de organizaciones internacionales y ayuda humanitaria, contribuyen y se han comprometido con ayudas de miles de millones de dólares para reconstruir el Líbano. Con estas iniciativas, se pretende reconstruir principalmente infraestructuras (carreteras, puertos, aeropuertos o puentes), desarrollar el sector energético con la construcción de nuevas plantas de energía y mejora de redes eléctricas; promover y apoyar las PYMES locales del país para crear empleo, y finalmente mejorar el sistema educativo a nivel escolar y con nuevos profesionales.
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Integración regional:
- Gracias a su ubicación geográfica estratégica en el Mediterráneo entre Europa y Oriente Medio, su historia y cultura diversa, y la mano de obra altamente cualificada con un sector privado más bien dinámico, el Líbano puede beneficiarse de una mayor integración con las economías regionales, como la Unión Europea y los países árabes. Esta mejora en la integración regional podría facilitar un mayor acceso a mercados para sus exportaciones, atraer inversiones extranjeras que pueden aportar capital y tecnología al país, reducir costes comerciales con sus posibles socios para beneficiar a las empresas y consumidores, y finalmente tener una mayor competitividad en el mercado y la economía global.
- Ya existen ejemplos de iniciativas de integración regional que han tenido lugar y se pretenden continuar mejorando e implementando, como el Acuerdo de Asociación con la UE en 2002 entrando en vigor en 2006 con el objetivo crear una zona de libre comercio entre el Líbano y la UE, lo que podría aumentar significativamente el comercio entre ambas partes. Las relaciones actuales están reguladas por el Acuerdo de Asociación en vigor desde el 2006, que preparó el escenario para la plena incorporación del Líbano a la Política Europea de Vecindad (PEV) en 2015, así como el Protocolo de Acuerdo Euromediterráneo y el Acuerdo de Libre Comercio, también en 2015. Entre 2021 y 2027, la cooperación bilateral se articulará a través del Neighbourhood, Development and International Cooperation Instrument (NDICI), cuyo objetivo es potenciar iniciativas de blending que combinen subvenciones europeas con préstamos bilaterales de países y de bancos de desarrollo.
- También es miembro de la Liga Árabe y participa en iniciativas de integración regional como la Acción Árabe Común, que tiene como objetivo promover el comercio y la inversión entre los países árabes. Las iniciativas del sector privado también contribuyen a esta integración con una red de cámaras de comercio en el Mediterráneo para implantar proyectos de interés y beneficiosos en ambas partes.
Desarrollo del turismo:
- El Líbano tiene un gran potencial para desarrollar su sector turístico, aprovechando su interesante cultura y patrimonio. Debido a problemas como los cortes en el suministro eléctrico, la debilidad de la red de telecomunicaciones y el peligro creciente causado por tensiones políticas, sociales y económicas, son factores que ralentizan la recuperación y evolución del sector. Antes del 2019 y la pandemia, el turismo aportaba aproximadamente 10.400 millones de dólares estadounidenses a la economía y representó el 19,1% del PIB. Sin embargo, en 2021, las cifras del sector fueron muy inferiores a las de 2019, pero en 2022 se observó cierta mejoría.
- A partir de ahora, una vez avancen las negociaciones para solventar las problemáticas regionales y desafíos a los que se enfrenta, debe aprovechar su potencial turístico con sus atractivos artísticos y culturales, oferta gastronómica y oferta vacacional (playa, esquí y montaña), además de la vida nocturna y actividad cultural.
Amenazas del Líbano
Conflictos regionales:
- Debido a la inestabilidad en la región causada debido a eventos como la guerra en Siria afectando de lleno al Líbano por la acogida de más de un millón de refugiados; las tensiones con Israel con el que ha tenido incluso conflicto armado en 2006; y la inestabilidad en Irak que ha tenido un impacto negativo en el país y ha evolucionado a la mayor presencia de grupos armados en el territorio y dificultado el comercio transfronterizo. Estos acontecimientos ya han tenido un impacto negativo en la economía y la seguridad del Líbano, pero en cualquier momento podría darse una escalada de eventos y desarrollar una nueva guerra.
- Los conflictos regionales también afectan al aumento de la delincuencia, una mayor pobreza donde los locales compiten por los mismos recursos escasos que la población local; el desempleo sobre todo de la juventud debido a la crisis económica causada por el conflicto; y la radicalización donde en las últimas dos décadas ha aumentado el apoyo a grupos extremistas en el país. Paralelamente y en consecuencia a los conflictos, el Líbano es vulnerable a la amenaza del terrorismo y los grupos presentes en el territorio (Hezbollah, ISIS, Hamás, Brigadas Abdullah Azzam).
Otras amenazas relevantes:
- La hiperinflación, la crisis económica y monetaria hacen que las prioridades del gobierno se inclinen hacia los temas económicos en lugar de los medioambientales. La falta de confianza de los ciudadanos en sus políticos y en el sector público puede generar sospechas de clientelismo o amiguismo en torno a las iniciativas, políticas o programas liderados por las instituciones públicas. La falta de aplicación de las políticasestatales en diversos sectores presupone que las nuevas políticas en temas como los medioambientales tampoco se cumplirán por no ser prioritarios.
- La falta de conocimiento sobre la economía circular puede limitar los proyectos a la producción de energía limpia, la producción de frutas y verduras orgánicas y las iniciativas de gestión de residuos sólidos, en lugar de reducir los residuos y la contaminación mediante estrategias adecuadas.
- Finalmente, la inestabilidad política, de seguridad y económica en la región hace que el Líbano se centre en sus prioridades de subsistencia a corto plazo en lugar de otros proyectos y visiones a largo plazo.
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